Nota aclaratoria: A lo
largo de este texto, se utilizará el masculino genérico. Estoy segura de que
todo aquel que se acerque a estas páginas es conocedor del significado de este
precepto gramatical del idioma español.. No utilizaré, por tanto, como ya tengo
por costumbre, el lenguaje inclusivo por considerarlo un insulto a la
inteligencia de los hombres y sobre todo de las mujeres, en absoluto
necesitadas de muletas de ninguna índole, y por tanto, tampoco semánticas.
No ha podido ser, o si, depende de la posición desde la que se observe a
realidad. Lo que a todas luces es evidente es que las izquierdas han ganado con
claridad las elecciones celebradas el pasado DIA 28 de
abril. Desde el PSOE a Izquierda Republicana, pasando por el partido de la ETA
con el terrorista Otegui, alias “el gordo”, a
la cabeza, los partidos representantes de opciones social-comunistas han
aumentado su representación. Ciudadanos, ha cosechado un buen resultado; el
Partido Popular ha cosechado un estrepitoso fracaso, y el jovencísimo partido
conservador de Abascal, VOX, ha entrado en el Congreso con 24 diputados,
partiendo de cero, lo que va a dar mucho que hablar en un futuro inmediato.
En absoluto tengo interés en hacer un análisis concienzudo
de tipo matemático que explique la victoria, especialmente notoria del PSOE, y
la derrota especialmente amarga del Partido Popular. Me interesa si, la extraordinaria
oportunidad que estos resultados ofrecen para acercarnos al rostro de España
del día de hoy, a nuestro presente nacional y desde ahí, si nos quedan ganas, poner la mirada en el futuro, también mas inmediato, y hacerlo desde una
perspectiva alternativa.
Comenzamos. En síntesis…
-
Nuestro país se encuentra literalmente partido por la
mitad en términos ideológicos. Las dos Españas
están mas vivas que nunca, igualadas en un 43% de votos, aunque el reparto de
escaños por cuestiones de aritmética electoral le otorgue una mayoría
significativa al bloque de izquierdas, sobre todo al Psoe.
-
El partido hegemónico de centro derecha, ha recibido
un importantísimo varapalo. Limitando por su izquierda con CS, y por su derecha
con Vox, ha visto reducido su nicho electoral de manera abrumadora. Ha dejado de
ser uno en la unidad, para ser uno mas de tres, el primero de esos tres, pero a
tiro de piedra de CS, y comenzando a experimentar de manera letal la incursión de Vox.
-
Los partidos independentistas catalanes y vascos no
solo se han mantenido, sino que han incrementado notoriamente su representación.
En este caso no podemos hablar únicamente de ideología en términos de
izquierdas y derechas, porque el aglutinante de este voto es la reivindicación es el separatismo bajo cualquier paraguas ideológico, desde
presupuestos formalmente democráticos, o abiertamente revolucionarios en el
sentido mas estricto y mas peligroso término. El golpismo catalán, el
terrorismo vasco, el chantaje al estado, se han visto refrendados mayoritariamente
por los ciudadanos catalanes y vascos con el voto mayoritario a ER, PNV y
Bildu.
-
El PSOE que durante los últimos 10 meses ha gobernado
España con Sánchez en la Moncloa, ha visto igualmente respaldada su actuación
en el gobierno nacido de la moción de censura al PP de Rajoy. Es muy importante
considerar este aspecto porque no se puede argumentar que la ciudadanía fuera desconocedora, a la hora de depositar su papeleta en la urna, del talante, los modos y los objetivos
del Partido Socialista. No era un
futurible, ni una incógnita, para los españoles. Casi un año gobernando nuestro país
permitía disponer de una información valiosa, y diáfana de lo que la izquierda
socialista previsiblemente hará con los votos de los ciudadanos.
-
Podemos ha sufrido como en el caso del PP, aunque no de
manera tan dramática, una importante perdida de confianza por parte de su
electorado. En este caso, la mordida le ha venido a Iglesias por la derecha, si
entendemos, que yo no lo tengo claro en absoluto, que han sido sus votantes mas
moderados los que se han fugado al PSOE, dado que no es precisamente la
moderación lo que ha caracterizado la actuación gubernamental sanchista.
-
Vox aparece como un nuevo actor en la escena política,
avanzando desde Andalucía. La formación verde conservadora suma en porcentaje de
un 2% mas votos que todos los partidos independentistas juntos (filoterroristas incluidos). Este es un dato que conviene no olvidar. Su legitimidad
es indiscutible y el refrendo que
obtiene en las urnas alcanza, prácticamente los 3 millones de electores.
Esta podría ser, a grandes rasgos, la foto fija de los
resultados de las generales del 28A. Mi
sensación al respecto es de enorme preocupación, compensada por la serenidad
que nace en la certidumbre. Hoy sabemos donde estamos, que ya es mucho saber,
sobre todo después de navegar a la deriva de los gobiernos de Rajoy, (el ultimo
de ellos ha sido una deriva a merced de los vientos independentistas y el
chantaje nacionalista vasco) y del gobierno “experimental” de los 10 meses de Sánchez.
Los resultados del 28 de Abril son, a mi parecer, enormemente clarificadores.
Creo que estas elecciones han sido un punto de inflexión que
tendrá consecuencias importantes, muy importantes para España. No porque nos
encontremos ante una situación de confrontación ideológica de izquierda versus
derecha, que es la esencia necesaria del juego político y por tanto,
saludable. Me inquieta la constatación
de que desde hace mucho tiempo en nuestro país, en nuestra Patria, se
comenzaron a vulnerar, a vaciar de contenido las libertades individuales, la
igualdad ante la ley de los españoles de manera alarmante, y de que soberanía
popular está siendo carcomida, fragmentada, por la imposición de soberanías localistas sustentadas en conflictos identitarios alimentados por la
xenofobia, el racismo, y en plena deriva totalitaria y generados en gran medida, de manera
interesada artificialmente durante décadas.
La dialéctica de la
dualidad en Democracia exige el escrupuloso respeto a los derechos básicos de libertad
de opinión, de expresión y de reunión, (entre otros) sin los cuales el ejercicio
de la acción política en igualdad de condiciones y oportunidades para las
diferentes proyectos políticos deviene en absolutamente imposible. Por otro
lado, y en esta misma línea, los derechos de opinión, de expresión y de reunión,
no son meras entelequias, formulaciones virtuales, sino que toman cuerpo y
tienen una traslación cierta y eficaz en el ejercicio de la acción política de
los ciudadanos amparados por un sistema democrático rector y regulador del la
misma. La Democracia como sistema que reconoce y ampara nuestros derechos (también
obligaciones), es la forma política que se da la Nación para organizarse, y
promover el progreso y el bien común de sus ciudadanos. Es, por tanto, la
Nación, anterior al propio sistema político; cualquier forma en que se articule
el Estado, incluso, la democrática, debería tener como objetivo prioritario, la
preservación de la misma. En nuestro país, la soberanía nacional se define muy
claramente. La sustancia que amalgama jurídicamente,
la nación española no es otra que el pueblo español en su conjunto. Esta
afirmación es uno de los pilares básicos (si no el principal) de nuestra
Constitución, Ley de leyes, en todos los sistemas constitucionales y democráticos
del mundo.
Las elecciones y la campaña electoral que han tenido lugar recientemente
han puesto de manifiesto los síntomas, los signos, que permiten constatar que nuestra
Democracia adolece de una progresiva y
preocupante debilidad y todos sabemos que a
menos democracia, menos libertad, mas totalitarismo. Por supuesto, a menos
igualdad, menos seguridad y menos progreso.
La parición de VOX en
el escenario político desde su presentación en Vista Alegre ha sido uno de los
factores que ha puesto sobre la mesa y nos ha permitido reconocer realidades impropias de un
país moderno, y de una democracia saludable.
El multitudinario acto en Madrid, en plaza de toros de Vista
Alegre, fue el punto de partida de la formación y su presentación en sociedad.
A partir de este momento, seguí con mucha atención sus intervenciones en las redes sociales, sus muchísimos mítines preelectorales, siempre con llenazos impresionantes; las
declaraciones en directo de sus líderes, y me leí detenidamente su programa político/económico. Con esto quiero decir que, independientemente
de cualquier valoración por afinidad o disparidad con los verdes de Abascal, he
procurado tener un conocimiento directo de sus objetivos políticos, de su
propuesta de modelo de país, y de sociedad. Por eso puedo afirmar
rotundamente que el tratamiento de que ha sido objeto el joven partido político,
denota, desgraciadamente la intolerancia, la falta de espíritu democrático, el
autoritarismo y el desprecio por la libertad que se respira en nuestro país.
Desde el mismísimo día siguiente a las elecciones andaluzas,
en las que Vox obtuvo una significativa representación parlamentaria contra
todo pronostico, todos los medios de comunicación, prácticamente sin excepción,
han llevado a cabo una tarea de acoso y derribo constantes, a todas horas, en
todos y cada uno de sus programas informativos, tertulias, e incluso en programas
de los llamados del corazón. Han mentido sobre sus propuestas, han insultado a
sus lideres, los han ridiculizado, acosado y señalado como
indeseables y como un peligro publico. Los lideres políticos de la izquierda,
pero no solo, con responsabilidades incluso de gobierno han injuriado gravísimamente tachando de xenobos, racistas,
fascistas etc. a sus lideres y a sus simpatizantes.
El paradigma de esta situación fue la búsqueda a pié de
calle con micrófono y cámara en mano, en una población andaluza, casa por casa,
pidiendo a los vecinos que identificaran y señalizaran las viviendas y a las
personas que habían votado a VOX en las elecciones autonómicas, al mas puro
estilo nazi. Esta hazaña periodística la llevó a cabo la TV La Sexta, propiedad
del multimillonario comunista Roures, bruñidor de reuniones secretas en su
domicilio con el golpista Junqueras y el comunista Pablo Iglesias. El escándalo
fue de tal magnitud que hasta la propia cadena tuvo que salir a dar
explicaciones de su comportamiento vergonzoso y peligrosísimo. La misma TV, por
cierto, agraciada con la entrevista del papa Francisco, para vergüenza de muchísimos
católicos, pero este asunto lo abordaremos en otra ocasión.
Esta caza de brujas ha tenido consecuencias. Para dar un paso en cualquier parte del territorio nacional, sus lideres y sus militantes, han tenido que ir protegidos por las fuerzas de seguridad y aun así, se les ha escupido, apedreado, intimidado y agredido. La agresividad totalitaria ha sido dirigida contra la derecha sobre todo contra VOX, pero no solo. La catalanoborroka de las CUP y sus adláteres, socios del gobierno socialista de Sánchez en el Congreso, han acosado, vertido insultos sexistas, insistentemente a las mujeres del centro derecha, intentando amedrantar y aterrorizar a Inés Arrimadas, por ejemplo, y lincharon a Cayetana Álvarez de Toledo en Barcelona, porque las fuerzas de seguridad lo impidieron. La violencia política se ha instalado en la calle. Basta decir que la candidata la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, tiene que llevar a sus cuatro niños al colegio con escolta.
Pero los síntomas de debilidad de nuestro sistema
democrático no están únicamente en la calle. Reviste, si ello es posible, mayor
gravedad aun, el desarrollo normativo de una legislación que coacciona, limita,
e impone la voluntad de un ejecutivo socialista con vocación totalitaria. La
Ley de Memoria Histórica, la Ley de Violencia de Genero, las leyes educativas
de implantación de la perspectiva de genero, cuya letra y espíritu, atentan con
la libertad han alcanzado la vida social y
cultural, económica del país. La legislación sectaria pseudoprogresista llega hasta el límite de establecer por ley la desigualdad
de los ciudadanos, entre hombres y mujeres, entre comunidades autónomas, coarta la liberad de los padres para educar a sus hijos conforme a sus valores y
creencias religiosas, imponen una determinada, interesada y parcial visión de nuestra
Historia mas reciente, amordaza libertad de opinión, de expresión y de cátedra.
La izquierda española ha trazado con nitidez los objetivos y
procedimientos de una ingeniería social que, todo parece indicar, le permitirá
mantenerse en el poder en un futuro próximo. Una izquierda, cuyos postulados
sociales, económicos, culturales de son el reflejo de una ética que queda
retratada en una imagen: la fotografía del brindis del partido socialista
vasco, con el máximo representante del PNV, y el terrorista Otegui. El chupito
envenenado con la indecencia moral de la que el Partido Socialista hace gala, que
todo hay que decirlo, no comienza con Sánchez, pero que si alcanza su máximo
exponente con el que sin duda será el próximo presidente durante los próximos
cuatro años elegido en las urnas.
El gobierno socialista, liderado por Pedro Sánchez, el
hombre que ni siquiera ha podido justificar todos los interrogantes y las
abrumadoras certezas de su atribuida
tesis doctoral, apoyado por los socialistas en el poder autonómico y municipal,
ha mostrado a España bien a las claras quien es, como es, que pretende y como va
a llevar a cabo sus objetivos de gobierno de nuestro país. Decía con antelación
que las elecciones del 28A, han sido de enorme utilidad para retratar fielmente
a quienes les hemos dado la riendas de nuestro futuro mas inmediato.
La mitad de los ciudadanos españoles, al menos, le han dado el Si al social-comunismo, aliado
en lo mas esencial de su discurso con el independentismo, saltando incluso por
encima de la ética más básica, de no aceptar la connivenencia de un partido filo
terrorista, como Bildu.
La izquierda empeñada en levantar osamentas de 80 años de las victimas republicanas de la guerra civil que
no tuvieron su legitimo entierro, o de sacar a Franco del Valle de los Caidos,
muerto hace más de 40 años, no tiene el menor interés sin embargo,
curiosamente, en respetar el sufrimiento y el dolor de las victimas del
terrorismo vasco Etarra, tan recientes que sus familias y amigos aun no han
superado el duelo. Los crímenes son tan atroces que algunos de ellos nunca podrán
hacerlo.
La izquierda, que compra voluntades independentistas con
privilegios económicos y premia la deslealtad y la insolidaridad a España del
PNV, y los partidos golpistas catalanes, con riadas de fondos económicos
procedentes de los impuestos de todos los españoles y a costa de nuestra
sanidad, nuestra educación, nuestras ayudas a la dependencia, etc, a costa de
nuestro endeudamiento nacional, esta izquierda es, la que ha sido elegida para
gobernar nuestro país por los ciudadanos en las urnas. El social-comunismo
gobernara España en los próximos años. El PSOE con el apoyo de Podemos, y los
partidos independentistas y filoterroristas, indispensables para que sume la mayoría
suficiente parlamentaria harán lo que tengan que hacer para conseguir sus
objetivos, de sobra conocidos, y lo españoles debemos ser muy conscientes de
ello, tanto los que les apoyaron como los que no lo hicimos.
En este momento, y volviendo la vista atrás, no demasiado
tiempo, es muy sencillo constatar la inmensa responsabilidad de la derecha (por
llamarla de alguna manera), del Partido Popular en la situación que vive actualmente
nuestro país. Mariano Rajoy Brey, colega en la intimidad del insigne Rodríguez
Zapatero, como confesara este ultimo en una entrevista en 2018, ha sido una tragedia
para España y para el centro derecha. A todos nos reconocen por nuestro amigos,
y a los políticos, y sobre todo, por sus enemigos. Los enemigos de Rajoy fueron
aquellos que le recordaron su obligaciones constitucionales, la necesidad de
mantener la lealtad a la Nación
española. Mientras Mariano estrechaba lazos con el dirigente socialista que llegaba
a pactos políticos con la ETA asesina y
se comprometía a aceptar lo que los independentistas catalanes le pusieran
encima de la mesa, este mismo Mariano, ponía en el punto de mira de su odio y
de su desprecio a Rosa Diez, o a José Antonio Alcaraz. La una representaba la
fidelidad y defensa constitucional contra el independentismo de la Nación
Española; el otro, simbolizaba el grito en el desierto contra la indiferencia
culpable, de la victimas del terrorismo etarra, por la Memoria, la Dignidad y
la Justicia, abandonados y destruidos con el gobierno popular organizativamente,
mediaticamente, en términos de movilización ciudadana, con las mismas
estrategias que el partido socialista había utilizado durante los gobiernos de
su predecesor Zapatero.
El Partido Popular durante casi diez años, quizá mas,
renunció a la defensa de los valores y la ética del centro derecha. Su política
atentó, directamente a la línea de flotación de la ideas fuerza
conservadoras-liberales. Llevado de una soberbia infinita, igualada solo por su
enfangamiento en la corrupción, llevó a cabo una política de comunicación
centrada en el apaciguamiento de los medios de comunicación mayoritariamente
controlados por multimillonarios de izquierdas y fundamentalmente al servicio
del independentismo y del PSOE. Siempre pagando el precio en cobardía política, con un papel bochornoso e impúdico de palmero, de agradaor de la vulgar y
tóxica progresía española. Abdicar de cualquier principio, ser incapaces de
defender una idea liberal, ni enfrentarse con un criterio conservador a la
izquierda, a esto le llamaron año tras año, los voceros del PP, llevar a cabo
una política reformista de centro. Ni
siquiera ellos sabían lo que querían decir o el significado de semejante
afirmación. Preguntémonos que hacía en el Gobierno la mano derecha de Rajoy, la
todopoderosa vicepresidenta, Sáenz de Santamaría, y que hace a día hoy fuera de
él, y encontraremos una respuesta muy esclarecedora, y por otro lado, nada
sorprendente.
Para mas señas, y por identificar durante este tiempo a algunas de las voces actuales del
Partido Popular, el mismismo Pablo Casado, estuvo largo tiempo en la palestra,
defendiendo estas posiciones, las de su jefe de filas, y no otras. Hacía
demasiado frío fuera de partido. Que se lo pregunten a Santiago Abascal.
El centro derecha vive en España una situación nada halagüeña,
mas bien todo lo contrario. Ciudadanos liderado con Albert Rivera, no acaba de
llegar, y el partido popular parece estar agonizando; a Vox, la formación
verde, le queda todo por crecer, y no lo va a tener fácil. Las estructuras mas
duras del poder del estado, van a intentar impedírselo por todos los medios, y
cuando digo todos, quiero decir exactamente eso, que es mucho decir.
Pese a lo que pudiera parecer, a veces en la Historia
podemos observar como, lo mas explicito, lo que nos parece mas evidente, no es
todo lo que realmente existe, y eso puede llegar a ser un factor determinante
en el cambio de rumbo de las sociedades y de las políticas nacionales. Ciertamente
el hemiciclo salido de las urnas el 28 A ha dado lugar a unas mayorías que posibilitan el gobierno de partidos
que amenazan la igualdad de todos los españoles y la pervivencia de la nación española, pero fuera, en la
calle, hay una ciudadanía quizá ligeramente minoritaria que se resiste a
dejarse eliminar, constituida por personas que de manera natural y reflexiva
rechazan las propuestas de una nación destruida y fragmentada en reinos de
taifas, de una ideología de genero que condena a niños y a hombres, a niñas y a
mujeres, a perpetuar una desigualdad injusta y e inhumana; que no admite un
estado burocrático que alimenta la voracidad de instituciones, de los chiringuitos de
poder; que se planta contra las mamandurrias de organizaciones empresariales o
sindicales garrapatas que parasitan nuestros recursos y son obstáculos
reales a nuestro progreso y bienestar social; que reivindican la libertad de expresión
y de opinión políticas e ideológicas, de educación y de cátedra, que hagan
posible una sociedad verdaderamente plural, en la que los debates sociales sobre
aquellas cosas que afectan a nuestra vida como ciudadanos, sean libres, públicos
y transparentes. Pervive aun hoy, una España que quiere avanzar en la
controversia pacífica y libre, que no va a tolerar la violencia política en la
calle, la amenaza, la coacción, ni la mordaza; personas corrientes que no
aceptan el amedrentamiento de los violentos, azuzados como hemos visto, desde
partidos políticos que se dicen democráticos y que están sentados en nuestras
instituciones, para vergüenza y oprobio de nuestra nación y de nuestra historia.
Existe una ciudadanía, valiosísima, innovadora, capaz de ir
contra la corriente fortísima de lo que ordena y manda el establishmen social comunista; que no esta dispuesta a que se le
indique como tiene que educar a sus hijos, como debe relacionarse sexualmente,
a que Dios debe rezar o no rezar, y en que idioma esta obligada a hacerlo. Son
los ciudadanos de a pie, a los que no les hacen gracia los chistes sobre el
holocausto judío, son las mujeres que no nos sentimos identificadas con esas
otras que dicen representarnos, que hablan en nuestro nombre sin preguntarnos, y
que se sacan las tetas de su ropa interior como si fueran ubres, para mostrarlas
públicamente a quien no tiene el menor interés en dirigirles la mirada; las mujeres y hombres ofendidos,
aburridos y hartos de mujeres fanatizadas que profieren alaridos y gritan
consignas feroces y soeces en contra de los que son nuestros padres, nuestros
hijos, nuestras parejas, nuestros amigos y contra nosotras mismas.
Aunque no estén en la pomada de los medios de comunicación social
comunistas, hay una España muy lúcida y consecuente, que no quiere abortar a
sus hijos, que acoge a los inmigrantes llegados del otro lado del mundo pero
que sabe que no tenemos lugar para todos ellos, y no queremos verles
convertidos en mendigos o delincuentes en nuestras calles, sucios y pobres.
Somos muchos los españoles que pensamos que la solución al problema migratorio,
pasa porque seamos nosotros los que lleguemos hasta a su casa en África, a ayudar, a arrimar el hombro, con fondos económicos, con formación, con
iniciativas empresariales, sanitarias, con el control de la corrupción
gubernamental, para que sigan siendo africanos en África, que trabajan por el
futuro de los suyos, por sus derechos humanos, por el desarrollo democrático y
el progreso económico de sus países, con el convencimiento de que otro
continente africano es posible, con sus mejores hombres y con nuestra decidida,
eficaz y honesta solidaridad.
Hay una España, perdedora de las elecciones del 28ª, si,
pero indispensable. Portadora de un paradigma social, político y cultural, que
por ser heterogénea pone el acento en unos aspectos mas que en otros, pero que
en conjunto, esta muy alejada de lo que a día de hoy constituye la estructura
de poder que el Parlamento Español refleja. La pregunta que nos hacemos es como desenvolvernos y encarar este momento objetivamente desfavorable. Mi
respuesta es simple: perseverando, confiando en nosotros mismos. RESISTIENDO. No
hay secreto, ni formula mágica. La realidad es la que es.
Hay que hacer lo que hay que hacer. Lo que debe hacerse:
VOTAR. Poner la confianza en los
partidos que entendamos que mejor nos representan. Aquí empieza y termina para
mi la utilidad del voto, en que mi voz, mas fuerte o mas débil, llegue a las
instituciones. No me cansaré de repetirlo. Asumo con naturalidad estar en la
periferia de lo adecuado, lo guay, lo
que se lleva, lo que se dice, lo que se
hace, y sobre todo, de lo que pretenden imponerme desde el poder
cualquiera que este sea y bajo las siglas que se presente, si no pasa antes el
visto bueno del filtro de mi razón, mi ética, mis creencias y mi libertad. La
fidelidad, la lealtad, a la hora de depositar mi voto en una urna, esta comprometida
con mis principios. La propuesta política que reciba mi confianza deberá adecuarse
a los mismos, y no al revés.
El panorama político en España es complicado para el
centro-derecha. Haría bien en arrepentirse de sus muchos pecados, el principal,
haber gobernado contra los suyos, y
haber traicionado prácticamente todas las promesas hechas a su electorado. En
la oposición tendrá la oportunidad de hacer propósito de enmienda. Va a estar
un rato largo en el rincón de pensar. Yo confío en que de su reflexión salga
reforzada, y con agudeza intelectual y moral para comprender que la lealtad y la
confianza de los ciudadanos no siempre tienen un precio ni siquiera el de la
amenaza de un futuro incierto y que la traición
no suele ser recompensada por los enemigos.
Escribe San Juan al obispo de Laodicea “ Se de tus obras;
que no eres ni frío ni caliente: ojala fueses frío o caliente. Mas porque eres
tibio, que ni eres ni frío ni caliente, te comenzará a vomitar de mi boca”
(Apocalipsis, Cap III). La tibieza que
ha caracterizado los gobiernos populares de Mariano Rajoy (sobre todo de Rajoy)
han sido letales para España, y los electores les han rechazado. VOX ha nacido
desde el vacío, y la desesperanza, y se ha convertido, en una alternativa
incipiente, pero verosímil, y a día de hoy constituye una realidad política
incontestable. Han llegado a las instituciones, y con mayor o menor dificultad,
creo que están fuertes y con ganas de trabajar para los españoles y por España.
Ese es su mejor aval para los electores. Vienen con un proyecto de futuro para nuestra
nación sin complejos y con coraje. No
solo están sino que están para quedarse. El Partido Popular debería en mi
opinión no perder de vista esta realidad.
Las Elecciones Municipales y Autonómicas están a la vuelta
de la esquina. Yo volveré a votar, y mi voto irá a la misma formación que en
las Elecciones Generales. Mi voto será a buen seguro, políticamente incorrecto…
¿Qué se entiende por incorrecto? Leí hace poco una definición ocurrente y
certera, dice así …
Mamá, ¿Qué significa
ser políticamente incorrecto?- le preguntaba una chica a su madre, a lo que
ésta le contesto, lo siguiente: Renunciar a tu propio criterio para conseguir la
falsa aceptación de una mayoría de imbéciles.
No se si la palabra imbéciles, es la adecuada por exceso o
por defecto, eso lo dejo a la opinión de cada uno, que cada cual se pregunte en
lo que valora de su criterio o su renuncia.