domingo, 12 de mayo de 2019

ELECCIONES EN ESPAÑA: 28 A ... 26 M


Nota aclaratoria: A lo largo de este texto, se utilizará el masculino genérico. Estoy segura de que todo aquel que se acerque a estas páginas es conocedor del significado de este precepto gramatical del idioma español.. No utilizaré, por tanto, como ya tengo por costumbre, el lenguaje inclusivo por considerarlo un insulto a la inteligencia de los hombres y sobre todo de las mujeres, en absoluto necesitadas de muletas de ninguna índole, y por tanto, tampoco semánticas.

No ha podido ser, o si, depende de  la posición desde la que se observe a realidad. Lo que a todas luces es evidente es que las izquierdas han ganado con claridad las elecciones celebradas el pasado DIA 28 de abril. Desde el PSOE a Izquierda Republicana, pasando por el partido de la ETA con el terrorista Otegui, alias “el gordo”, a  la cabeza, los partidos representantes de opciones social-comunistas han aumentado su representación. Ciudadanos, ha cosechado un buen resultado; el Partido Popular ha cosechado un estrepitoso fracaso, y el jovencísimo partido conservador de Abascal, VOX, ha entrado en el Congreso con 24 diputados, partiendo de cero, lo que va a dar mucho que hablar en un futuro inmediato.

En absoluto tengo interés en hacer un análisis concienzudo de tipo matemático que explique la victoria, especialmente notoria del PSOE, y la derrota especialmente amarga del Partido Popular. Me interesa si, la extraordinaria oportunidad que estos resultados ofrecen para acercarnos al rostro de España del día de hoy, a nuestro presente nacional y desde ahí, si nos quedan ganas, poner la mirada en el futuro, también mas inmediato, y hacerlo desde una perspectiva alternativa.

Comenzamos. En síntesis…

-          Nuestro país se encuentra literalmente partido por la mitad en términos ideológicos.  Las dos Españas están mas vivas que nunca, igualadas en un 43% de votos, aunque el reparto de escaños por cuestiones de aritmética electoral le otorgue una mayoría significativa al bloque de izquierdas, sobre todo al Psoe.

-          El partido hegemónico de centro derecha, ha recibido un importantísimo varapalo. Limitando por su izquierda con CS, y por su derecha con Vox, ha visto reducido su nicho electoral de manera abrumadora. Ha dejado de ser uno en la unidad, para ser uno mas de tres, el primero de esos tres, pero a tiro de piedra de CS, y comenzando a experimentar de manera letal la incursión de Vox.

-          Los partidos independentistas catalanes y vascos no solo se han mantenido, sino que han incrementado notoriamente su representación. En este caso no podemos hablar únicamente de ideología en términos de izquierdas y derechas, porque el aglutinante de este voto es la reivindicación es el separatismo bajo cualquier paraguas ideológico, desde presupuestos formalmente democráticos, o abiertamente revolucionarios en el sentido mas estricto y mas peligroso término. El golpismo catalán, el terrorismo vasco, el chantaje al estado, se han visto refrendados mayoritariamente por los ciudadanos catalanes y vascos con el voto mayoritario a ER, PNV y Bildu.


-          El PSOE que durante los últimos 10 meses ha gobernado España con Sánchez en la Moncloa, ha visto igualmente respaldada su actuación en el gobierno nacido de la moción de censura al PP de Rajoy. Es muy importante considerar este aspecto porque no se puede argumentar que la ciudadanía fuera desconocedora, a la hora de depositar su papeleta en la urna, del talante, los modos y los objetivos del Partido Socialista.  No era un futurible, ni una incógnita, para los españoles. Casi un año gobernando nuestro país permitía disponer de una información valiosa, y diáfana de lo que la izquierda socialista previsiblemente hará con los votos de los ciudadanos.

-          Podemos ha sufrido como en el caso del PP, aunque no de manera tan dramática, una importante perdida de confianza por parte de su electorado. En este caso, la mordida le ha venido a Iglesias por la derecha, si entendemos, que yo no lo tengo claro en absoluto, que han sido sus votantes mas moderados los que se han fugado al PSOE, dado que no es precisamente la moderación lo que ha caracterizado la actuación gubernamental sanchista.

-          Vox aparece como un nuevo actor en la escena política, avanzando desde Andalucía. La formación verde conservadora suma en porcentaje de un 2% mas votos que todos los partidos independentistas juntos (filoterroristas incluidos). Este es un dato que conviene no olvidar. Su legitimidad es indiscutible  y el refrendo que obtiene en las urnas alcanza, prácticamente los 3 millones de electores.

Esta podría ser, a grandes rasgos, la foto fija de los resultados de  las generales del 28A. Mi sensación al respecto es de enorme preocupación, compensada por la serenidad que nace en la certidumbre. Hoy sabemos donde estamos, que ya es mucho saber, sobre todo después de navegar a la deriva de los gobiernos de Rajoy, (el ultimo de ellos ha sido una deriva a merced de los vientos independentistas y el chantaje nacionalista vasco) y del gobierno “experimental” de los 10 meses de Sánchez. Los resultados del 28 de Abril son, a mi parecer,  enormemente clarificadores.

Creo que estas elecciones han sido un punto de inflexión que tendrá consecuencias importantes, muy importantes para España. No porque nos encontremos ante una situación de confrontación ideológica de izquierda versus derecha, que es la esencia necesaria del juego político y por tanto, saludable. Me inquieta  la constatación de que desde hace mucho tiempo en nuestro país, en nuestra Patria, se comenzaron a vulnerar, a vaciar de contenido las libertades individuales, la igualdad ante la ley de los españoles de manera alarmante, y de que soberanía popular está siendo carcomida, fragmentada, por la imposición de soberanías localistas sustentadas en conflictos identitarios alimentados por la xenofobia, el racismo, y en plena deriva totalitaria y generados en gran medida, de manera interesada artificialmente durante décadas.

La  dialéctica de la dualidad en Democracia exige el escrupuloso respeto a los derechos básicos de libertad de opinión, de expresión y de reunión, (entre otros) sin los cuales el ejercicio de la acción política en igualdad de condiciones y oportunidades para las diferentes proyectos políticos deviene en absolutamente imposible. Por otro lado, y en esta misma línea, los derechos de opinión, de expresión y de reunión, no son meras entelequias, formulaciones virtuales, sino que toman cuerpo y tienen una traslación cierta y eficaz en el ejercicio de la acción política de los ciudadanos amparados por un sistema democrático rector y regulador del la misma. La Democracia como sistema que reconoce y ampara nuestros derechos (también obligaciones), es la forma política que se da la Nación para organizarse, y promover el progreso y el bien común de sus ciudadanos. Es, por tanto, la Nación, anterior al propio sistema político; cualquier forma en que se articule el Estado, incluso, la democrática, debería tener como objetivo prioritario, la preservación de la misma. En nuestro país, la soberanía nacional se define muy claramente.  La sustancia que amalgama jurídicamente, la nación española no es otra que el pueblo español en su conjunto. Esta afirmación es uno de los pilares básicos (si no el principal) de nuestra Constitución, Ley de leyes, en todos los sistemas constitucionales y democráticos del mundo.

Las elecciones y la campaña electoral que han tenido lugar recientemente han puesto de manifiesto los síntomas, los signos, que permiten constatar que nuestra  Democracia adolece de una progresiva y preocupante debilidad y todos sabemos que a  menos democracia, menos libertad, mas totalitarismo. Por supuesto, a menos igualdad, menos seguridad y menos progreso.

La parición de VOX  en el escenario político desde su presentación en Vista Alegre ha sido uno de los factores que ha puesto sobre la mesa y nos ha permitido reconocer realidades impropias de un país moderno, y de una democracia saludable.

El multitudinario acto en Madrid, en plaza de toros de Vista Alegre, fue el punto de partida de la formación y su presentación en sociedad. A partir de este momento, seguí con mucha atención sus intervenciones en las redes sociales, sus muchísimos mítines preelectorales, siempre con llenazos impresionantes; las declaraciones en directo de sus líderes, y me leí detenidamente su programa político/económico. Con esto quiero decir que, independientemente de cualquier valoración por afinidad o disparidad con los verdes de Abascal, he procurado tener un conocimiento directo de sus objetivos políticos, de su propuesta de modelo de país, y de sociedad. Por eso puedo afirmar rotundamente que el tratamiento de que ha sido objeto el joven partido político, denota, desgraciadamente la intolerancia, la falta de espíritu democrático, el autoritarismo y el desprecio por la libertad que se respira en nuestro país.

Desde el mismísimo día siguiente a las elecciones andaluzas, en las que Vox obtuvo una significativa representación parlamentaria contra todo pronostico, todos los medios de comunicación, prácticamente sin excepción, han llevado a cabo una tarea de acoso y derribo constantes, a todas horas, en todos y cada uno de sus programas informativos, tertulias, e incluso en programas de los llamados del corazón. Han mentido sobre sus propuestas, han insultado a sus lideres, los han ridiculizado, acosado y señalado como indeseables y como un peligro publico. Los lideres políticos de la izquierda, pero no solo, con responsabilidades incluso de gobierno han injuriado gravísimamente tachando de  xenobos, racistas, fascistas etc. a sus lideres y a sus simpatizantes.

El paradigma de esta situación fue la búsqueda a pié de calle con micrófono y cámara en mano, en una población andaluza, casa por casa, pidiendo a los vecinos que identificaran y señalizaran las viviendas y a las personas que habían votado a VOX en las elecciones autonómicas, al mas puro estilo nazi. Esta hazaña periodística la llevó a cabo la TV La Sexta, propiedad del multimillonario comunista Roures, bruñidor de reuniones secretas en su domicilio con el golpista Junqueras y el comunista Pablo Iglesias. El escándalo fue de tal magnitud que hasta la propia cadena tuvo que salir a dar explicaciones de su comportamiento vergonzoso y peligrosísimo. La misma TV, por cierto, agraciada con la entrevista del papa Francisco, para vergüenza de muchísimos católicos, pero este asunto  lo abordaremos en otra ocasión.

 Esta caza de brujas ha tenido consecuencias. Para dar un paso en cualquier parte del territorio nacional, sus lideres y sus militantes, han tenido que ir protegidos por las fuerzas de seguridad y aun así, se les ha escupido, apedreado, intimidado y agredido. La agresividad totalitaria ha sido dirigida contra la derecha sobre todo contra VOX, pero no solo. La catalanoborroka de las CUP y sus adláteres, socios del gobierno socialista de Sánchez en el Congreso, han acosado, vertido insultos sexistas, insistentemente a las mujeres del centro derecha, intentando amedrantar y aterrorizar  a Inés Arrimadas, por ejemplo,  y  lincharon a Cayetana Álvarez de Toledo en Barcelona, porque las fuerzas de seguridad lo impidieron. La violencia política se ha instalado en la calle. Basta decir que la candidata la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, tiene que llevar a sus cuatro niños al colegio con escolta.

Pero los síntomas de debilidad de nuestro sistema democrático no están únicamente en la calle. Reviste, si ello es posible, mayor gravedad aun, el desarrollo normativo de una legislación que coacciona, limita, e impone la voluntad de un ejecutivo socialista con vocación totalitaria. La Ley de Memoria Histórica, la Ley de Violencia de Genero, las leyes educativas de implantación de la perspectiva de genero, cuya letra y espíritu, atentan con la libertad han alcanzado la vida social y cultural, económica del país. La legislación  sectaria pseudoprogresista llega hasta el límite de establecer por ley la desigualdad de los ciudadanos, entre hombres y mujeres, entre comunidades autónomas, coarta la liberad de los padres para educar a sus hijos conforme a sus valores y creencias religiosas, imponen una determinada, interesada y parcial visión de nuestra Historia mas reciente, amordaza libertad de opinión, de expresión y de cátedra.

La izquierda española ha trazado con nitidez los objetivos y procedimientos de una ingeniería social que, todo parece indicar, le permitirá mantenerse en el poder en un futuro próximo. Una izquierda, cuyos postulados sociales, económicos, culturales de son el reflejo de una ética que queda retratada en una imagen: la fotografía del brindis del partido socialista vasco, con el máximo representante del PNV, y el terrorista Otegui. El chupito envenenado con la indecencia moral de la que el Partido Socialista hace gala, que todo hay que decirlo, no comienza con Sánchez, pero que si alcanza su máximo exponente con el que sin duda será el próximo presidente durante los próximos cuatro años elegido en las urnas.

El gobierno socialista, liderado por Pedro Sánchez, el hombre que ni siquiera ha podido justificar todos los interrogantes y las abrumadoras certezas de  su atribuida tesis doctoral, apoyado por los socialistas en el poder autonómico y municipal, ha mostrado a España bien a las claras quien es, como es, que pretende y como va a llevar a cabo sus objetivos de gobierno de nuestro país. Decía con antelación que las elecciones del 28A, han sido de enorme utilidad para retratar fielmente a quienes les hemos dado la riendas de nuestro futuro mas inmediato.

La mitad de los ciudadanos españoles, al menos,  le han dado el Si al social-comunismo, aliado en lo mas esencial de su discurso con el independentismo, saltando incluso por encima de la ética más básica, de no aceptar la connivenencia de un partido filo terrorista, como Bildu.

La izquierda empeñada en levantar osamentas de 80 años de las victimas republicanas de la guerra civil que no tuvieron su legitimo entierro, o de sacar a Franco del Valle de los Caidos, muerto hace más de 40 años, no tiene el menor interés sin embargo, curiosamente, en respetar el sufrimiento y el dolor de las victimas del terrorismo vasco Etarra, tan recientes que sus familias y amigos aun no han superado el duelo. Los crímenes son tan atroces que algunos de ellos nunca podrán hacerlo.

La izquierda, que compra voluntades independentistas con privilegios económicos y premia la deslealtad y la insolidaridad a España del PNV, y los partidos golpistas catalanes, con riadas de fondos económicos procedentes de los impuestos de todos los españoles y a costa de nuestra sanidad, nuestra educación, nuestras ayudas a la dependencia, etc, a costa de nuestro endeudamiento nacional, esta izquierda es, la que ha sido elegida para gobernar nuestro país por los ciudadanos en las urnas. El social-comunismo gobernara España en los próximos años. El PSOE con el apoyo de Podemos, y los partidos independentistas y filoterroristas, indispensables para que sume la mayoría suficiente parlamentaria harán lo que tengan que hacer para conseguir sus objetivos, de sobra conocidos, y lo españoles debemos ser muy conscientes de ello, tanto los que les apoyaron como los que no lo hicimos.

En este momento, y volviendo la vista atrás, no demasiado tiempo, es muy sencillo constatar la inmensa responsabilidad de la derecha (por llamarla de alguna manera), del Partido Popular en la situación que vive actualmente nuestro país. Mariano Rajoy Brey, colega en la intimidad del insigne Rodríguez Zapatero, como confesara este ultimo en una entrevista en 2018, ha sido una tragedia para España y para el centro derecha. A todos nos reconocen por nuestro amigos, y a los políticos, y sobre todo, por sus enemigos. Los enemigos de Rajoy fueron aquellos que le recordaron su obligaciones constitucionales, la necesidad de mantener  la lealtad a la Nación española. Mientras Mariano estrechaba lazos con el dirigente socialista que llegaba a pactos políticos con  la ETA asesina y se comprometía a aceptar lo que los independentistas catalanes le pusieran encima de la mesa, este mismo Mariano, ponía en el punto de mira de su odio y de su desprecio a Rosa Diez, o a José Antonio Alcaraz. La una representaba la fidelidad y defensa constitucional contra el independentismo de la Nación Española; el otro, simbolizaba el grito en el desierto contra la indiferencia culpable, de la victimas del terrorismo etarra, por la Memoria, la Dignidad y la Justicia, abandonados y destruidos con el gobierno popular organizativamente, mediaticamente, en términos de movilización ciudadana, con las mismas estrategias que el partido socialista había utilizado durante los gobiernos de su predecesor Zapatero.

El Partido Popular durante casi diez años, quizá mas, renunció a la defensa de los valores y la ética del centro derecha. Su política atentó, directamente a la línea de flotación de la ideas fuerza conservadoras-liberales. Llevado de una soberbia infinita, igualada solo por su enfangamiento en la corrupción, llevó a cabo una política de comunicación centrada en el apaciguamiento de los medios de comunicación mayoritariamente controlados por multimillonarios de izquierdas y fundamentalmente al servicio del independentismo y del PSOE. Siempre pagando el precio en cobardía política, con un papel bochornoso e  impúdico de palmero, de agradaor de la vulgar y tóxica progresía española. Abdicar de cualquier principio, ser incapaces de defender una idea liberal, ni enfrentarse con un criterio conservador a la izquierda, a esto le llamaron año tras año, los voceros del PP, llevar a cabo una política reformista de centro. Ni siquiera ellos sabían lo que querían decir o el significado de semejante afirmación. Preguntémonos que hacía en el Gobierno la mano derecha de Rajoy, la todopoderosa vicepresidenta, Sáenz de Santamaría, y que hace a día hoy fuera de él, y encontraremos una respuesta muy esclarecedora, y por otro lado, nada sorprendente.

Para mas señas, y por identificar durante este  tiempo a algunas de las voces actuales del Partido Popular, el mismismo Pablo Casado, estuvo largo tiempo en la palestra, defendiendo estas posiciones, las de su jefe de filas, y no otras. Hacía demasiado frío fuera de partido. Que se lo pregunten a Santiago Abascal.

El centro derecha vive en España una situación nada halagüeña, mas bien todo lo contrario. Ciudadanos liderado con Albert Rivera, no acaba de llegar, y el partido popular parece estar agonizando; a Vox, la formación verde, le queda todo por crecer, y no lo va a tener fácil. Las estructuras mas duras del poder del estado, van a intentar impedírselo por todos los medios, y cuando digo todos, quiero decir exactamente eso, que es mucho decir.

Pese a lo que pudiera parecer, a veces en la Historia podemos observar como, lo mas explicito, lo que nos parece mas evidente, no es todo lo que realmente existe, y eso puede llegar a ser un factor determinante en el cambio de rumbo de las sociedades y de las políticas nacionales. Ciertamente el  hemiciclo salido de las urnas el 28 A ha dado lugar a unas  mayorías que posibilitan el gobierno de partidos que amenazan la igualdad de todos los españoles y la pervivencia  de la nación española, pero fuera, en la calle, hay una ciudadanía quizá ligeramente minoritaria que se resiste a dejarse eliminar, constituida por personas que de manera natural y reflexiva rechazan las propuestas de una nación destruida y fragmentada en reinos de taifas, de una ideología de genero que condena a niños y a hombres, a niñas y a mujeres, a perpetuar una desigualdad injusta y e inhumana; que no admite un estado burocrático que alimenta la voracidad de instituciones, de los chiringuitos de poder; que se planta contra las mamandurrias de organizaciones empresariales o sindicales  garrapatas que parasitan nuestros recursos y son obstáculos reales a nuestro progreso y bienestar social; que reivindican la libertad de expresión y de opinión políticas e ideológicas, de educación y de cátedra, que hagan posible una sociedad verdaderamente plural, en la que los debates sociales sobre aquellas cosas que afectan a nuestra vida como ciudadanos, sean libres, públicos y transparentes. Pervive aun hoy, una España que quiere avanzar en la controversia pacífica y libre, que no va a tolerar la violencia política en la calle, la amenaza, la coacción, ni la mordaza; personas corrientes que no aceptan el amedrentamiento de los violentos, azuzados como hemos visto, desde partidos políticos que se dicen democráticos y que están sentados en nuestras instituciones, para vergüenza y oprobio de nuestra  nación y de nuestra historia.

Existe una ciudadanía, valiosísima, innovadora, capaz de ir contra la corriente fortísima de lo que ordena y manda el establishmen social comunista; que no esta dispuesta a que se le indique como tiene que educar a sus hijos, como debe relacionarse sexualmente, a que Dios debe rezar o no rezar, y en que idioma esta obligada a hacerlo. Son los ciudadanos de a pie, a los que no les hacen gracia los chistes sobre el holocausto judío, son las mujeres que no nos sentimos identificadas con esas otras que dicen representarnos, que hablan en nuestro nombre sin preguntarnos, y que se sacan las tetas de su ropa interior como si fueran ubres, para mostrarlas públicamente a quien no tiene el menor interés en dirigirles la  mirada; las mujeres y hombres ofendidos, aburridos y hartos de mujeres fanatizadas que profieren alaridos y gritan consignas feroces y soeces en contra de los que son nuestros padres, nuestros hijos, nuestras parejas, nuestros amigos y contra nosotras mismas.

Aunque no estén en la pomada de los medios de comunicación social comunistas, hay una España muy lúcida y consecuente, que no quiere abortar a sus hijos, que acoge a los inmigrantes llegados del otro lado del mundo pero que sabe que no tenemos lugar para todos ellos, y no queremos verles convertidos en mendigos o delincuentes en nuestras calles, sucios y pobres. Somos muchos los españoles que pensamos que la solución al problema migratorio, pasa porque seamos nosotros los que lleguemos hasta a su casa en África, a ayudar, a arrimar el hombro, con fondos económicos, con formación, con iniciativas empresariales, sanitarias, con el control de la corrupción gubernamental, para que sigan siendo africanos en África, que trabajan por el futuro de los suyos, por sus derechos humanos, por el desarrollo democrático y el progreso económico de sus países, con el convencimiento de que otro continente africano es posible, con sus mejores hombres y con nuestra decidida, eficaz y honesta solidaridad.

Hay una España, perdedora de las elecciones del 28ª, si, pero indispensable. Portadora de un paradigma social, político y cultural, que por ser heterogénea pone el acento en unos aspectos mas que en otros, pero que en conjunto, esta muy alejada de lo que a día de hoy constituye la estructura de poder que el Parlamento Español refleja. La pregunta que nos hacemos es como desenvolvernos y encarar este momento objetivamente desfavorable. Mi respuesta es simple: perseverando, confiando en nosotros mismos. RESISTIENDO. No hay secreto, ni formula mágica. La realidad es la que es.

Hay que hacer lo que hay que hacer. Lo que debe hacerse: VOTAR. Poner la  confianza en los partidos que entendamos que mejor nos representan. Aquí empieza y termina para mi la utilidad del voto, en que mi voz, mas fuerte o mas débil, llegue a las instituciones. No me cansaré de repetirlo. Asumo con naturalidad estar en la periferia de lo adecuado, lo guay, lo que se lleva, lo que se dice, lo que se  hace, y sobre todo, de lo que pretenden imponerme desde el poder cualquiera que este sea y bajo las siglas que se presente, si no pasa antes el visto bueno del filtro de mi razón, mi ética, mis creencias y mi libertad. La fidelidad, la lealtad, a la hora de depositar mi voto en una urna, esta comprometida con mis principios. La propuesta política que reciba mi confianza deberá adecuarse a los mismos, y no al revés.

El panorama político en España es complicado para el centro-derecha. Haría bien en arrepentirse de sus muchos pecados, el principal, haber gobernado contra los suyos,  y haber traicionado prácticamente todas las promesas hechas a su electorado. En la oposición tendrá la oportunidad de hacer propósito de enmienda. Va a estar un rato largo en el rincón de pensar. Yo confío en que de su reflexión salga reforzada, y con agudeza intelectual y moral para comprender que la lealtad y la confianza de los ciudadanos no siempre tienen un precio ni siquiera el de la amenaza de un futuro incierto y que la traición  no suele ser recompensada por los enemigos.

Escribe San Juan al obispo de Laodicea “ Se de tus obras; que no eres ni frío ni caliente: ojala fueses frío o caliente. Mas porque eres tibio, que ni eres ni frío ni caliente, te comenzará a vomitar de mi boca” (Apocalipsis, Cap III).  La tibieza que ha caracterizado los gobiernos populares de Mariano Rajoy (sobre todo de Rajoy) han sido letales para España, y los electores les han rechazado. VOX ha nacido desde el vacío, y la desesperanza, y se ha convertido, en una alternativa incipiente, pero verosímil, y a día de hoy constituye una realidad política incontestable. Han llegado a las instituciones, y con mayor o menor dificultad, creo que están fuertes y con ganas de trabajar para los españoles y por España. Ese es su mejor aval para los electores. Vienen con un proyecto de futuro para nuestra nación sin complejos y con coraje.  No solo están sino que están para quedarse. El Partido Popular debería en mi opinión no perder de vista esta realidad.

Las Elecciones Municipales y Autonómicas están a la vuelta de la esquina. Yo volveré a votar, y mi voto irá a la misma formación que en las Elecciones Generales. Mi voto será a buen seguro, políticamente incorrecto… ¿Qué se entiende por incorrecto? Leí hace poco una definición ocurrente y certera, dice así …

Mamá, ¿Qué significa ser políticamente incorrecto?- le preguntaba una chica a su madre, a lo que ésta le contesto, lo siguiente: Renunciar a tu propio criterio para conseguir la falsa aceptación de una mayoría de imbéciles.

No se si la palabra imbéciles, es la adecuada por exceso o por defecto, eso lo dejo a la opinión de cada uno, que cada cual se pregunte en lo que valora de su criterio o su renuncia.