sábado, 30 de agosto de 2014

NIÑOS VICTIMAS

Escribo esta página alejada de Madrid, en un lugar de la Castilla que llamaban la Vieja. El paisaje es extraordinario, recio y sereno, salpicado de lomas y de viñedos. Tengo la sensación de que el tiempo transcurre muy despacio, marcado por el sonido de las campanas de la Iglesia centenaria que preside el pueblo desde lo mas alto. Es un templo bellísimo, silencioso, testigo de decenas de miles de nacimientos, de muertes, de bodas, de plegarias y, estoy segura también, de maldiciones, de odios, de insidias, de violencias y venganzas, de secretos inconfesables, de lamentos, y de días de gloria, de perdones, de arrepentimientos.
En el pueblo, la vida que vivo se queda arrumbada al margen del tiempo, de los avatares políticos, de los acontecimientos sociales, que engloban lo que denominamos genéricamente "las noticias”. Después de varios días sin ver la televisión o escuchar la radio, columpiándome en el limbo de la desinformación, hoy he cargado en mi móvil la las páginas de los diarios informativos en la red y he dado un vistazo a vuela pluma, a los titulares mas significativos, francamente, con notable desinterés. Sin embargo, algo me ha devuelto a una realidad lejana de un manotazo psicológico, un latigazo ha sacudido mi conciencia, y durante unos instantes, un profundo horror me ha invadido.
La noticia, era muy escueta, y venía acompañada de un video de youtube, verdaderamente espeluznante. La información presente en los medios de mayor difusión decía así: "El ejercito islámico enseña a los niños a decapitar con muñecos". Los terroristas islámicos del EI enseñan a sus hijos pequeños a ser yihadistas, en lo que han denominado Baby Yihad. El video en cuestión muestra a una niña de corta edada, cubierta con un velo negro, recitando en voz alta el Coran, con un cuchillo en la mano; fríamente se arrodilla y tumba a su muñeco-bebe, y le rebana el cuello con saña, con un odio que da pavor...El video ha sido subido a red por los propios yihadistas, imagino que para causar el horror y el terror mas profundo en todos nosotros.
Niños asesinos y niños víctimas. Niños usados y abusados en los conflictos políticos o religiosos o ambas cosas, en multitud de lugares en el mundo, me han venido al recuerdo. Muy cerca de esta niña, en Irak quizá, centenares de niños cristianos son decapitados y sus cabezas clavadas en las plazas de ciudades como Mosul, para escarmiento de herejes.
Memoria. Hace unos días, con motivo de la visita del Papa Francisco a Corea, los periódicos recogieron las declaraciones de una anciana victima de abusos por parte de las tropas japonesas, durante la Segunda Guerra Mundial. Ella ha recordado al mundo su espantoso calvario. Hoy sabemos que 200.000 niñas y adolescentes, jovencísimas mujeres, fueron raptadas, violadas y la mayor parte muertas por abusos. Las llamaron "las mujeres del consuelo". Las esclavas sexuales entregadas a las tropas fueron violadas por treinta o cuarenta soldados diariamente, algunas de ellas no habían cumplido los doce años. Miles de chicas coreanas, filipinas, de China, de Taiwan murieron fruto de terribles torturas sexuales.
Niñas. Leo la denuncia realizada por World Vision España que tres millones de niñas y adolescentes son mutiladas cada año en el Mundo. En Egipto, siete de cada diez niñas, son sometidas a la tortura de la mutilación genital.
India. Las violaciones de niñas y jóvenes dalits en este país son una práctica habitual que ha saltado a los medios de comunicación con el asesinato de sus victimas por parte de las castas superiores, por no hablar de las condiciones de humillación y violencia de todo tipo a las que se ven sometidas niñas y mujeres en todo el país.
Inglaterra. Noticia que ha conmocionado a la sociedad inglesa, "1.400 niños fueron sometidos a explotación sexual desde 1997 a 2013, en la ciudad de Rotherham" . La autora del informe-denuncia Alexys Jay inspectora de de Trabajo Social en Escocia explica que el tipo de atroces abusos que sufrieron estas niñas (en su mayoria) son difíciles de describir. Nadie puede saber el alcance de la barbarie cometida contra los niños en esta ciudad de apenas 250.000 habitantes, explica la funcionaria. En este caso, la mayoría de los violadores eran pertenecientes a la comunidad paquistaní .
Medio Mundo. Niños y niñas son usados como soldados. Las niñas, ademas, son objeto de todo tipo de agresiones, abusos y violaciones sexuales. Según informes de Amnistia Internacional en 2012, 19 países en en el mundo, reclutaban niños como instrumentos de violencia, víctimas inocentes de adultos inmisericordes. Niños pobres, raptados en las calles, sacados de sus escuelas, robados a sus padres nutren numerosos ejércitos y guerrillas. Son incontables los niños y niñas brutalmente tratados, vejados y humillados en entornos militares y paramilitares.
Prostitución. Según cálculos de Humaniun mas de tres millones de niños están actualmente atrapados en las redes de prostitución en todo el mundo. Las explicaciones a este fenómeno, cuya rentabilidad afirman, va en aumento, son múltiples. Todas las causas confluyen en la tortura y el abuso, en la enfermedad y la muerte prematura de los niños indefensos.
Abortados, asesinados recién nacidos. Qué está sucediendo con los hijos de las miles de mujeres que son objeto de violencia sexual en la guerra? Nada sabemos sobre ellos. Y desde hace apenas dos décadas, la ley internacional sobre tiempos de guerra ha borrado todo rastro de los derechos de esos niños.
De Norte a Sur, de Ese a Oeste de nuestro mundo, el maltrato a los niños parece producirse con una impunidad que produce sonrojo. El poder, el encubrimiento, la perversión, la pobreza, la maldad humana se confabulan contra los mas débiles, contra las vidas mas frágiles fracturando su existencia, corroyendo la esperanza, y destrozando el futuro de los seres mas indefensos.
A veces de me pregunto con que clase de barro fuimos modelados. Que ponzoña impregnó la naturaleza que nos define como humanos. Que nos hizo tóxicos y venenosos. Qué olvidamos. Que es aquello que no conseguimos recordar, que ponga en nuestra conciencia la esencia de ser, ademas de miembros de la especie humana, personas. Me digo a mi misma que quizá exagero, que son la excepciones en un mundo esencialmente honesto y generoso con sus niños; que cosas tan atroces no sucedan de modo cotidiano... y sin embargo, son tantos y tantos y tantos y tantos..., y tantos son los sollozos de los niños tan vulnerables, tan débiles, tan indefensos. Y es tan grande y tan poderoso el silencio, y su voz es tan lejana, y su lamento tan mudo, tan ignorado.
Ellos, los niños, parecieran estar amortizados, salir de balde, mientras el mundo hace la vista gorda, y se pone de perfil, cuando se les maltrata, se les viola, se les usa, se les explota, se les mata. En defensa de sus pequeñas vidas no se rompen relaciones internacionales, ni se llevan a cabo bloqueos económicos, ni se deciden medidas enérgicas y radicales por parte de la ONU. Pederastas de guante blanco y alma corrosiva compran y venden sus lagrimas a su antojo. Hombres y mujeres miserables les usan y arrojan al olvido sus pequeñas ilusiones de pequeñas vidas que no son importantes para nadie.
Nuestras opulentas sociedades, nuestros sociedades pobres, nuestros Organismos Internacionales, nuestras democracias y nuestras dictaduras, nuestras tribus y nuestras ciudades, en todos los lugares que habitamos los seres de nuestra especie dejamos libres y campantes a demasiados hombres del saco, a los ogros feroces, a la brujas cantanas, a los malos dragones, y ellos, los malos, y de entre los malos, los peores, devoran a nuestros niños en sus tenebrosas telas de araña.
Esa niña, cuyas manitas se afanan en degollar al bebe de juguete nos muestran la obscenidad de un mundo sórdido e inmoral, que transforma la inocencia en un asesinato.

No ha sido para mi, esta una escritura, solaz y veraniega. Ya comprendo que a alguno de aquellos a los que estas palabras lleguen habrán abandonado antes de llegar a su final inminente. No lamento sin embargo cada punto, ni cada coma, ni frases ni adjetivos, ni palabra alguna hasta el punto y final. Es tanta la tristeza que me producen los ojos que no veo de la niña que se esconde tras el velo negro, tanto el miedo que me da su vocecita clamando la suras. Es tan grande mi angustia que sigue al cuchillo rasgando de verdad el cuello que se desprende del bebe de mentira. Es tan profunda mi verguenza por lo que le han hecho a esta pequeña. Pobrecita niña asesina de muñecos.

viernes, 15 de agosto de 2014

REVOLUCIONARIO DE PAPEL COUCHE

No hay manera de librarse de este señor pesadísimo que se llama Pablo Iglesias. La tele, los medios digitales, la prensa escrita es que no nos dan respiro, en el café madrugador de la mañana, en la radio, que si Podemos esto, que si D.Pablo lo otro, y mas de lo mismo en los informativos, las tertulias a todas horas, nos muestan de frente al personaje, de costado, mirando al horizonte, posando como una diva "joligudiana" a media sonrisa y mirada seductora de “.... chica tu valeshhhhhsss muuuuuschoooo”. Que cansancio veraniego, que sopor, que aburrimiento la charleta del Sr. Iglesias. Me habia propuesto no mencionar al superferolítico lidercillo de moda, no cruzar la portezuela del corralito en el que D. Pablo pone los huevos, con perdón, en sentido figurado y considerado como figura retórica un ave gallinácea, por lo de su  contínuo y pertinaz cacareo. Hoy el huevo lo ha  puesto en el Diario El Mundo en el que este señor viene a decir que Jesucristo y él serían algo así como colegas, y que Jesús militaría en su formación política. Como parece obvio, la vanidad del personaje es supina, y su ego, paulatinamente más hipertrófico. D. Pablo camina con pasos apresurados hacía una egolatría patética, y en esta perdida de pudor no tiene el menor inconveniente en mostrarse como un personajillo sencillamente ridículo.

Pero, como el verano en Madrid está siendo maravillosamente templado, y sus mañanas frescas y luminosas... Como sus calles estan serenas y apacibles, sin el bullicio de la gran ciudad funcionando a pleno rendimiento, y como me siento especialmente generosa en este viernes fiesta en mi ciudad, le dedico a D. Pablo, a sus seguidores, y simpatizantes, un relato muy breve de Slawomir Mrozek, que se titula “La Revolución”, como antídoto eficaz contra el pensamiento dogmático, las tentaciones liberticidas, y sobre todo, contra la ramplonería vulgar de los personajes populistas de medio pelo,  con pinta además, de estar sucio y casposo.

A todos aquellos que visiten esta mi casa, y que en nada se identifiquen con el señor Iglesias, les digo por anticipado, que les va a divertir enormemente la grandiosa sabiduría, que les impresionará la inteligencia libre, que se esconde este cuentito, del escritor polaco anticomunista , fallecido recientemente en exilio.

Sin más, aquí tienen:

LA REVOLUION”. Autor Slawomir Mrozek


En mi habitación la cama estaba aquí, el armario allá y en medio la mesa.
Hasta que esto me aburrió. Puse entonces la cama allá y el armario aquí.
Durante un tiempo me sentí animado por la novedad. Pero el aburrimiento acabó por volver.
Llegué a la conclusión de que el origen del aburrimiento era la mesa, o mejor dicho, su situación central e inmutable.

Trasladé la mesa allá y la cama en medio. El resultado fue inconformista.

La novedad volvió a animarme, y mientras duró me conformé con la incomodidad inconformista que había causado. Pues sucedió que no podía dormir con la cara vuelta a la pared, lo que siempre había sido mi posición preferida.
Pero al cabo de cierto tiempo la novedad dejó de ser tal y no quedo más que la incomodidad. Así que puse la cama aquí y el armario en medio.
Esta vez el cambio fue radical. Ya que un armario en medio de una habitación es más que inconformista.

Es vanguardista.

Pero al cabo de cierto tiempo...Ah, si no fuera por ese "cierto tiempo". Para ser breve, el armario en medio también dejo de parecerme algo nuevo y extraordinario.

Era necesario llevar a cabo una ruptura, tomar una decisión terminante. Si dentro de unos límites determinados no es posible ningún cambio verdadero, entonces hay que traspasar dichos límites. Cuando el inconformismo no es suficiente, cuando la vanguardia es ineficaz, hay que hacer una revolución.

Decidí dormir en el armario. Cualquiera que haya intentado dormir en un armario, de pie, sabrá que semejante incomodidad no permite dormir en absoluto, por no hablar de la hinchazón de pies y de los dolores de columna.

Sí, esa era la decisión correcta. Un éxito, una victoria total. Ya que esta vez "cierto tiempo" también se mostró impotente. Al cabo de cierto tiempo, pues, no sólo no llegué a acostumbrarme al cambio -es decir, el cambio seguía siendo un cambio-, sino que, al contrario , cada vez era más consciente de ese cambio, pues el dolor aumentaba a medida que pasaba el tiempo.

De modo que todo habría ido perfectamente a no ser por mi capacidad de resistencia física, que resultó tener sus límites. Una noche no aguanté más. Salí del armario y me metí en la cama.
Dormí tres días y tres noches de un tirón. Después puse el armario junto a la pared y la mesa en medio , porque el armario en medio me molestaba.

Ahora la cama está de nuevo aquí, el armario allá y la mesa en medio. Y cuando me consume el aburrimiento, recuerdo los tiempos en que fui revolucionario.

martes, 12 de agosto de 2014

MIGUEL PAJARES, DESCANSE EN PAZ

Miguel Pajares, el sacerdote español infectado por el virus del Ebola ha muerto, según leo en la prensa, en la madrugada del día de hoy, en el Hospital Carlos III de Madrid.


Una honda tristeza inunda  mi corazón. 

lunes, 11 de agosto de 2014

EBOLA, EL NOMBRE DE NUESTRO MIEDO.

Ebola, la palabra que ha calentado el verano con fuegos abrasadores venidos de otro continente. Nos despierta de nuestro sueño simplón de cuerpos sobrealimentados, buscadores incansables de la eternidad, huidores de la arruga, juramentados en el bótox; perfiles ambiguos de seres confundidos y volátiles, solícitos consumidores de palabras, enganchados a las imágenes que nos confirmen quienes somos, que somos, y sobre todo, que quieren que seamos.

Ebola, pudiera ser un nombre de mujer o de una exótica danza, quizá un baile calentón... ¿que te gusta bailar, a mi me pone el zumba-zumba¡ uff pues a mi lo que mola, es el Ebola. Triste es la pasión que despierta la palabra que nos llega del otro lado del mundo, de Africa; el Continente de los diamantes, de hermosísimas lunas, de ardientes atardeceres.

Ebola canalla, que llega hasta nosotros con un cuchillo entre los dientes, y amenaza con cortarnos de cuajo la borrachera de adolescentes envejecidos que vivimos en nuestros pequeños y estrechos mundoS de diseño, donde no tenemos muy claro si vamos o venimos; donde, aturdidos miramos la televisión y escuchamos que a los negros, se les va la vida en sangre, y en heces, y en vómitos y en llantos.

Ebola, menudo marrón en Africa. Marrón, que es negro, como el Continente. El bicho dicen que es viajero y que va de extrangis. Que nos puede llegar en cualquier momento, aquí, a nuestra mismísima casa y darnos matarile. Un pié en el otro mundo, y el otro que nos queda en este valle, por un ratito nada mas, el que dure su destructor afán incansable. Ebola, que no, que no se baila, que se duerme. Dueño del sueño eterno, sin fin. El sueño del dolor, primero, y luego el del olvido.

Hace años que es un viejo conocido, solo de algunos. De los negros pobres. De los negros abandonados. De los negros lejanos. De los otros negros. De los que van quedando porque han sobrevivido al dengue, a la malaria, al tifus, a la tuberulosis, al sida... los supervivientes de la sed, del hambre en carne viva … los negros a los que nadie enseño a leer, a sumar... los niños que encallecen primero por los pies y luego, por el alma, con la fe inocente puesta en otro amanecer o en otra luna. Los padres y las madres reconocen al Ebola casi al instante, cuando empuja sus puertas siempre abiertas y se cuela hasta la cocina, y entonces, solo les queda abrazar a sus hijos y huir de su sombra hacia ninguna parte, ultima patria de aquellos que no son nada.

Desde 1976 algunas voces en su mayoría blancas, han clamado en el árido desierto de nuestra estulticia, del acomodo hortera y banal de mundos supuestamente modernos, acomodados y aburridos. Apenas llegaba a nuestros oidos el eco de sus gritos de auxilio, porque emergían de la otredad, de sombras harapientas y remotas, apenas perceptibles. Nunca contestamos a sus suplicas, estamos, en general, demasiado ocupados para prestar atención a los mundos susurrantes de aquellos que apenas tienen voz.

Pero ha sucedido, como si de un cuento terror de Lovecraft se tratase, que nuestro rey del mambo de los virus, el hoy archifamoso Ebola, ha visitado nuestro mundo, ni mas ni menos, y estamos estupefactos y perplejos porque, sencillamente, la Parca nos puede arrastrar por los pelos, como si no fuéramos otra cosa que ¡africanos negros¡.

¡ Ah, Occidente, la vieja Europa, la novísima Norteamerica, han despertado con pánico en los ojos y no saben si están dormidas o si está despiertas. Comienza a desperezarse Occidente. OMS se ha puesto las pilas, y reconoce que la embestida del virus puede causar un inmenso dolor, también a nosotros, a todos nosotros. El mundo científico se moviliza, trabaja a marchas forzadas, los mercados reflejan fielmente, disparando el precio de los laboratorios, los avances de posibles medicamentos eficaces. Es urgente calmar nuestro pánico, devolver la serenidad a nuestras placidas existencias, establecer mecanismos para preservar nuestra seguridad. Seguramente, tendremos éxito en nuestra batalla, porque en esta guerra contra el Ebola, hemos sacado toda nuestra artillería y estamos dispuestos a fajarnos en el combate.

Entre tanto, nos llega la noticia, de que George Combey, compañero y hermano de congregación Los Hermanos de San Juan de Dios, del sacerdote español Miguel Pajares, ha fallecido anoche, victima de la infección. Hace unos días, cayó, la hermana Chantal Pascaline. El padre Miguel está siendo sometido a un tratamiento aun experimental para tratar de salvar su vida.

Ellos, los voluntarios, los médicos y enfermeros cristianos, mujeres y hombres de diferentes iglesias, miembros de organizaciones humanitarias, han sido las voces en el aire que pasado como una brisa caliente por nuestros países, por los oídos de nuestros gobernantes, sin apenas rozarnos, ni movernos un pelo. Ellos, los que aguantaron hasta que no quedaba nadie que no fuera una alma, solos en compañía de la muerte, y del dolor de aquellos a los que cuidaron hasta su ultimo suspiro, son el símbolo de la grandeza que se esconde en la naturaleza humana. Ellos, nos devuelven la dignidad que creímos perdida cuando renunciamos a escuchar, a reflexionar, a reivindicar aquello que nos hace personas, cuando, perdimos la compasión y dejamos de sentir piedad.

Ellos, que son victimas y testigos, portadores de la infección y heroicos gladiadores armados de la esperanza, sabedores de la poderosa fuerza de la ultima sonrisa, de la penúltima palabra de consuelo... ellos, se han convertido de la noche a la mañana en protagonistas inesperados de la noticia en todo el Mundo, que no es otra que... el Miedo.


A todos aquellos que murieron santamente, heroicamente, en la defensa de la vida y del amor entre los hombres, tan lejos de todos, tan cerca del Cielo. Descansen en paz.