martes, 17 de julio de 2018

SAENZ DE SANTAMARIA: LA CANDIDATA DE RODRIGUEZ ZAPATERO


El PP busca líder. Mal lo tiene para encontrar la persona capaz de encontrar el rumbo político después de haber perdido el Norte hace ya tantos años. La patada en el trasero recibida por Rajoy de sus socios de confianza vascos, (no se puede hacer mas el ridículo, dicho sea de paso) ha convertido al partido del gobierno en partido de oposición de la noche a la mañana,  pero sin cresta ni cabeza que levantar en Hemiciclo. La humillación ha sido morrocotuda, y el ex presidente de gobierno, una vez repuesto del sofocón,  se ha puesto el traje de registrador y otra cosa mariposa.

Entre tanto, el gallinero pepero no hay gallina ni pollo que no tema ser desplumado, en este sin vivir en que se ha convertido las primarias. Los dos candidatos que han pasado el corte, lo han hecho muy igualados. Contra todo pronostico el rival de la todopoderosa ex vicepresidenta Saenz de Santamaría, no ha sido Maria Dolores de Cospedal, sino Pablo Casado, que ha llegado impulsado por el deseo de renovación y cambio dentro del partido, y al aparato le ha cogido con el pie cambiado y muy mala jeta.

La ambición extraordinaria de Santamaría yo creo que es archiconocida, tanto, como su absoluta incompetencia en el abordaje de los problemas gravísimos de España, sobre todo en lo tocante  al golpismo catalán. Si algo parece haber caracterizado su gestión ha sido su capacidad para la intriga maniobrera en el peor sentido de la palabra, con el objetivo puesto en manejar el cotarro a su antojo, siempre al  lado de Rajoy como su mano derecha, para lo cual no ha tenido el menor pudor, en cortar todas las cabezas que pudieran sobresalir de la suya, a golpe de titular y con hachazos mediáticos  letales.  La imagen del bolso de la todavía vicepresidenta del gobierno reposando sobre el escaño vacío de un Rajoy en espantada lloriqueando ausente su ridícula derrota en la moción de censura, se vuelve a día de hoy absolutamente elocuente. Mejor cabeza de ratón, que cola de león. Ser líder de la oposición es sinónimo de ser candidato a la presidencia del la nación. Esta es una baza  que, en  mi opinión, hacia mucho tiempo que Santamaría parecía querer jugar. Lo novedoso de esta historia es que va a tener que emplearse a fondo para ganar la partida.

Pablo Casado ha aparecido en la escena sin que nadie le llamara, sin que nadie le invitara. Contrariamente a Santamaria no tiene nada que perder, porque, si bien es cierto que lleva militando muchos años en el partido pese a su juventud, lo ha hecho en un segundo plano de manera inmerecida. Casado ha tomado la palabra para decir a todo aquel que quiere oirle, y sobre todo a aquellos a los que pudiera molestar, que es posible un partido popular que no apeste, que no defraude, que no averguence, y sobre todo, que no aburra, porque el partido popular ha sido para su electorado, al menos para buena parte, una continua fuente de frustración, de sonrojo y de cabreo sordo.

Pablo Casado no ha contado con mas apoyos que la militancia, y ha tenido que enfrentarse  a todo el aparato. Los jerifaltes que cortan el bacalao en el partido popular, acostumbrados a comerse lo que ellos mismos llevan guisandose durante años ignorando a las bases, y despreciando a sus votantes, están que fuman en pipa con este hombre joven que ha osado a hacer uso de su libertad de expresión y a su derecho a liderar el partido desde los ejes que constituyen la esencia de una derecha moderna y democrática. La señora ex vicepresidenta debe estar flipando en colores, porque si alguien parecía tener la certeza de llevarse el gato al agua una vez neutralizado y fuera de escena Rajoy, era ella. Pues va a ser que no, que no lo va a tener tan fácil.  Hasta el ultimo  momento tendrá que lidiar con el pequeño gran hombre en parece haberse convertido Pablo Casado. Hasta tal punto se percibe la inseguridad del quipo que apoya a Santamaria en este momento,  que finalmente han impedido el debate de ideas propuesto y solicitado por Casado. Hablar de ideología o del proyecto que tienen para España en el momento tan crucial por el que pasa nuestro pais hubiera sido muy enriquecedor, sin embargo, la negativa ha sido rotunda. A la ex vicepresidenta le interesa moverse en aguas estacadas y bajo su control, tiene … otro estilo…quizá le va más la maniobra entre bambalinas y el trueque bajo la mesa que el debate abierto a cara descubierta. Esto si que no supone ninguna novedad, ninguna sorpresa. Que se lo pregunten sino a las victimas de los dossiers que han salido con precisión terroríficamente matemática, y que han terminado de manera abrupta con personalidades muy relevantes del partido popular, dicen las malas lenguas. 

En esta batalla por el liderazgo del centro derecha en Partido Popular no solo están participando los directos contendientes. Los medios de comunicación, como no podría ser de otra manera, están pujando a favor la mayor parte de ellos, de Santamaria. Me temo que después de conocer el interés que ha tenido la ex en el control e influencia en los mismos, quizá tengan cosas que agradecerla o que temerla. El caso es que los diarios mas importantes y muchos digitales de renombre están muy interesados en que lo cambie en  centro derecha en España sea para que no cambie nada, y en esta posición, se encuentran lógicamente también los partidos a la izquierda y los independentistas, que encuentran en Soraya Saenz de Santamaria, un interlocutor “dialogante”. Es absolutamente evidente, y  las pruebas me remito, que en este intercambio de pareceres y de cromos, han ganado ellos, y ha perdido España y que lo que pretenden es que España siga perdiendo y por supuesto ellos ganando.

El ultimo en dejar meridianamente claro y blanco y sobre negro su preferencia ha sido el ex presidente socialista Rodriguez Z que ha calificado a Santamaria como dialogante y a Casado como un retroceso. Cuánto es de agradecer la opinión de Rodriguez, su apoyo debería ser absolutamente esclarecedor para los compromisarios que van a ejercer su voto este fin de semana. ¿Van ellos a votar al candidato que propone el desastroso expresidente socialista? ¿Quien debe liderar los proximos años partido popular que represente al centro derecha español, aquel que dicte el Psoe, el PNV, los independentistas como Oriol Junqueras, El Pais, La Sexta, la Cuatro…?

Pablo Casado, en estos días, ha intentado por todos los medios avalar con su discurso su candidatura. No ha llegado mas lejos porque sencillamente no le han dejado, impidiendo que sus propuestas llegaran a las bases, a los compromisarios, y a la ciudadanía en general, en un debate de abierto con Soraya Saenz de Santamaría. La ex vicepresidenta viene avalada por aquellos que están en las Antípodas de los votantes de centro derecha. La unidad del partido no será posible si estas primarias las gana la persona que interesa justamente a aquellos que nunca han aceptado democráticamente la legitima existencia del centro derecha en España, identificándole torticeramente con un pasado casi remoto de la dictadura de Franco, en un ejercicio verdaderamente abyecto de intolerancia y despotismo políticos.

Rodriguez Z. lo ha expresado con total claridad: Casado representa el “retroceso”, pero da la casualidad, que ni él, ni los suyos, ni aquellos que su partido tiene como socios, ni sus terminales mediáticas, son los modelos que interesan al electorado de centro derecha. Los votantes del partido popular necesitan imperiosamente un líder que les ilusione, les ofrezca esperanza, un proyecto acorde con una ideología de esencias y valores distintivos, limpios, democráticos y modernos, con el que avanzar hacia un ideal de pais con el que puedan identificarse y  que puedan defender en las urnas. El interés de España debería ser el interés de los compromisarios electores del partido popular, que esta muy lejos de ser el interés personal de la candidata que propone el expresidente socialista Rodriguez Z.  Si  tan interesante y valiosa le parece Soraya Saénz de Santamaría, podría ficharla para sus propias filas. A buen seguro le sería de la máxima utilidad sobre todo en aquellos asuntos que requieran grandes dosis de opacidad en los que tanto ella, como él mismo, se mueven como peces en el agua.

Si Santamaría sale del partido popular, sería deseable que dejase la puerta bien abierta, y durante algún tiempo. El suficiente como  para ventilar la casa de hedor irrespirable que deja la corrupción, y la deslealtad política para con su electorado.  El tiempo suficiente también para que regresen aquellos que nunca debieron ser forzados a abandonar la casa del centro derecha por la que sacrificaron sus vidas, y perdieron a manos de los enemigos de España a sus amigos y compañeros. Si por el contrario deciden cerrar su puerta, y que todo siga igual, serán sus votantes los que tiren la llave al mar, y buscarán caminos alternativos por los que transitar, porque el tiempo solo lleva una dirección y esa es hacia delante.

El Partido Popular se ha convertido en los últimos años, en un cascarón vacío, hueco y resquebrajado. Se puede hacer política desde el debate interno, incluso desde el conflicto enriquecedor, pero no se puede desde la nadería, la vacuidad y el oportunismo interesado y cortoplacista. Soraya Saénz de Santamaría, ni siquiera es el pan para hoy, y sin embargo, es con toda seguridad el hambre para mañana. Los compromisarios tienen la palabra. Por el bien de nuestro país, ojala sean capaces se superar la presión de todos aquellos, que son muchos, interesados en hacer del centro derecha una masa de ciudadanos ciegos, mudos y sordos, que haya renunciado a su protagonismo político,  a su legitima capacidad de contribuir a la sociedad y de ejercer democráticamente el gobierno de España.

sábado, 14 de julio de 2018

jueves, 12 de julio de 2018

EL GOBIERNO DE SÁNCHEZ… EL PENSAMIENTO ÚNICO


Sánchez no da puntada sin hilo. Desde el primer minuto de su gobierno teje la tela de araña en la que quedarán atrapadas, secuestradas e inermes nuestras libertades. Hace ya muchísimo tiempo que tengo la firme convicción de que en la vida en general, y en todo aquello que concierne a la política en particular, las palabras y los gestos siendo importantes, no deben distraernos de lo fundamental, que no es otra cosa que los hechos. Son precisamente los hechos, las tomas de decisión, la ejecutoria inmediata del gobierno de Sánchez, los que me producen enorme inquietud.

Que Sánchez había dado sobradas muestras de que es un personaje de naturaleza inquietantemente siniestra es en mi opinión un hecho constatable. Pero el ciudadano Sánchez no tiene el menor interés para mí. Si lo tiene, sin embargo, la ejecutoria de su mandato gubernamental, y para valorar la misma, es necesario no olvidar ni por un momento que Sánchez es el primer presidente de la democracia española que los ciudadanos no hemos elegido en las urnas, que su “acceso” al poder se ha producido con una ridícula  representación parlamentaria de 84 diputados. Los españoles nunca quisimos a Sánchez como presidente de gobierno de nuestro país. Nos convocaron a las urnas y dijimos que no a su candidatura. Nos preguntaron democráticamente y le contestamos con 84 diputados. Eso es todo. Nada más que eso.

Sánchez, no ha llegado al poder por la voluntad popular, sino tras la negociaciones con partidos antiespañoles, filoterroristas, y populistas comunistas, que representan la izquierda mas radical, mas liberticida, y mas corrupta de Europa. Con esta argamasa de indeseables políticos Sánchez ha construido el pedestal al que se ha aupado con toda su desfachatez, y desde el que reinará como un faraoincito con gafas de sol (que patética la foto en el helicóptero…) mientras siga regalando a sus socios, pedazos arrancados a la soberanía nacional y jirones de nuestras libertades individuales.  Sánchez, es importantísimo recordarlo, le debe el aire que respira políticamente a sus socios parlamentarios. Es consciente de su insignificancia, de su fragilidad, de su nadería y pagaráel precio que haga falta para mantenerse en ese islote diminuto de sus 84 escaños.

A Sánchez me voy a permitir no mencionarle por su cargo. No es lo mismo legalidad que legitimidad. Como ciudadana estoy obligada a aceptar la una pero nada me puede obligar a reconocer la otra. En todo caso, y como decía al comienzo, lo importante son los hechos, los actos de gobierno de este señor que no tiene el menor interés en convocar elecciones generales y que hablen las urnas.

En el tiempo que lleva durmiendo en La Moncloa, se han sucedido las actuaciones de sus distintos ministros, que no son otra cosa que apéndices cualificados de su voluntad. Hace poco mas de un mes que este Gobierno socialista ejerce el poder, y no hay ni una sola de sus medidas que no atente contra las libertades  individuales, ni una de ellas que no vaya encaminada a debilitar al Estado, es decir, a la nación española. Sánchez acaba de comenzar su andadura como el hombre con más poder en nuestro país, dispuesto a ejercerlo al servicio de aquellos que le sostienen, los enemigos de España y los enemigos de la libertad. Tenemos cumplida información de los Consejos de Ministros, no voy a referirme a cada una de las medidas normativas adoptadas. Están en todos los medios referidas y explicadas con detalle. Pueden resumirse a vuela pluma en un endeudamiento bestial del Estado, subidón de impuestos a los ciudadanos y a las empresas, beligerancia explicita contra la escuela concertada, acercamiento de los terroristas vascos etarras, imposición totalitaria ideológica en las escuelas con interés de dirigir el pensamiento de los niños y adolescentes españoles a través de una asignatura de obligatoria a la que denominan “valores cívicos”, eliminación de la religión como asignatura evaluable, la mayúscula chorrada y gravísimo atentado, además,  a la igualdad de los ciudadanos ante la ley, del consentimiento “expreso” en la relaciones sexuales para no ser consideradas delito penal por abuso/violación sexual, riadas de miles de euros de todos los ciudadanos para templar gaitas con los golpistas catalanes mientras conspiran abiertamente contra España y nos insultan gravemente a todos los españoles llamándonos bestias taradas por la boca de ese hombre al que no voy a calificar llamado Torras y al que Iceta, invitaría a cenar. No quiero ni imaginarme la conversación que ambos personajes pudieran mantener, mas que nada por cuidar mi estomago y mis meninges, y como de ningún modo podía faltar el espantajo guerracivilista, abundando en la Ley de la Memoria Histórica del anterior presidente socialista Rodríguez Z. Sánchez se ha propuesto tirar de la manta de la estulticia, y con ella de los huesos o lo que quede del General Franco; no si tendrá pensado un fusilamiento simbólico del esqueleto para dar salida al rencor obsesivo y enfermizo del que izquierda española no consigue liberarse.

El Frente Popular que nos gobierna en España a día de hoy ha dejado muy claro cuales son sus motivaciones y sus prioridades. Seria bueno que los partidos políticos y los ciudadanos de centro derecha, sumidos hoy en lo que aparentemente es el desconcierto, reflexionaran seriamente sobre lo que se nos viene encima. Pero no solo ellos. Los españoles del espectro político de la izquierda, tendrán también que valorar si merece su confianza una izquierda caduca, casposa, totalitaria y antinacional.

Ciudadanos de derechas, de centro y de izquierdas, tendremos que dilucidar si estamos dispuestos fracturar nuestra nación, a fracturar nuestra convivencia y a someternos al pensamiento único de unos partidos políticos movidos por una ideología autoritaria y liberticida, y en el caso de los independentistas, xenófoba y racista, además.  Los ciudadanos decidimos. Ahora si, en Democracia decidimos. Desde hace más de 40 años, los españoles decidimos. El futuro es nuestro. No podemos decir lo mismo de nuestro presente, usurpado por Sánchez. Se presentó en la Cámara con una  moción de censura al Gobierno legal y legítimo de Mariano Rajoy, con el compromiso de convocar a los ciudadanos a unas elecciones generales de manera inmediata. Mintió por toda la boca. Mintió con toda su jeta. Mintió.

Este es el personaje Sánchez. Los adjetivos calificativos sobre su persona no seré yo quien se los atribuya, aquí y ahora. Se basta y se sobra el solito, para adjetivarse. Quizá sea el momento de que la ciudadanía, los partidos democráticos, la sociedad civil, reivindiquemos juntos que, el futuro es nuestro, y la calle también.

Somos la ciudadanía del siglo XXI, tenemos voz y voto. Que nadie decida por nosotros. Recuperemos nuestro presente para hacer posible nuestro futuro.